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Hay un momento en el que necesitas parar, frenar, y mirar donde estas parada. Sinceramente nose donde estoy. A donde voy. Ni donde estube. Ni porque me fui.
Siento la necesidad de salir de este lugar constantemente, de estar sola yo y mi cabeza, de ver la vida desde otro punto de vista. Pero desde el punto en que lo vea, se cae.















No hace más que eso, caerce. Veo como todo , absolutamente todo, lo que hago, hice o quiero hacer, se cae. Se desploma como una montaña de arena . No puedo soportar como todo se viene abajo, y menos puedo soportar la idea de no poder hacer nada. Pero de repente me siento sin fuerzas, el aire no pasa con normalidad, se torna pesado y me cuesta respirar. Sé que tengo que hacer algo, pero nada de lo que hago parece ser útil. Todo cae en un pozo sin fondo donde nadie puede verlo, ni siquiera yo.