Absurdo

En el momento en el que suena tu despertador y eso significa que tenes que levantarte de la cama, de la comodidad de ese espacio en el que te sumergís en tus sueños, en el lugar en el cual te encontras solo vos acompañado de tu inconsciente. Donde tus deseos más profundos pueden hacerse realidad con el simple echo de cerrar los ojos, dejar volar tu imaginación e introducirte en la paz más infinita.
¿Que es lo que cruza tu mente al momento de despertarte? o ¿Que es lo ultimo en lo que pensas antes de dormirte? ¿Que soñás?.
Mientras estas solo, simplemente mirando el techo y escuchando tu música preferida. En ese momento en el que te sentís tranquilo y conectado solo con vos mismo y tus pensamientos, ¿Cuales son?.

Acaso ahora, estando entre otros brazos, otros cuerpo. Otro amor ¿Podes recordar a aquella niña?. ¿Acaso aún hay un momento en tu vida que dedicas a recordar con un dejo de nostalgia, todos esos momentos únicos juntos supieron vivir? Esa inocencia que se veía en sus ojos, esa paz que ambos sentían con solo una mirada, esa hermosa sensación de tranquilidad con solo saber que ella estaba ahí. Con que facilidad eso se derrumbó.
Esa niña a la que supiste amar en algún momento, dejó de serlo. Esa perla que sacaste de su fortaleza ,ya no la necesita. Se convirtió en una especie de roca. En algo que no ve, no mira, no siente. Tu, quien no eras un niño siquiera en esos tiempos, ese muchachito al que ella le había mostrado ese lado feliz de la inocencia, al que le había enseñado que libre uno se puede sentir y que seguro a la vez. Ahora estabas en otro lugar, ahora tenias otras responsabilidades, ahora habías encontrado alguien a quien amar ¿o no?. Como sea, ya estaban en caminos diferentes. Dos idiotas que por orgullo , dejaron caer ese maravilloso mundo que juntos habían creado. Solo se quedaron viendo como las paredes brillantes que los protegían, se oxidaban y se caían a pedazos.
Dos que no sabían ya como protegerse, porque al hacerlo. Se dañaban más. Ambos iban a destiempo.



















Al momento de poner la cabeza en la almohada, cerrar los ojos y dejar volar la imaginación, muchacho, soles cruzar los pensamientos de esta niña que ya no lo es. A menudo me pregunto que hubiera pasado si hubiéramos actuado distinto ¿Acaso iríamos por el mismo camino?, ¿O nos encontraríamos aún más separados?. Saber de tu vida, de tus proyectos, me da alegría.
Me alegra que aún me recuerdes y que puedas escucharme cuando te quiero ayudar. Me da gusto saber que necesitas mi ayuda. Pero me confunde, me marea, me destroza; no saber que papel estoy jugando. Tengo la horrible necesidad de arrancarte de tu mundo y traerte de nuevo acá. Es un acto de egoísmo puro de mi parte. Llevamos vidas separadas. Pero cada vez se me vuelve más difícil evitar que seas lo último en lo que pienso antes de dormir y lo primero a la hora de despertar.